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miércoles, 6 de junio de 2012

♥ Para Ellas, Gemelos Esmaltados ♥




Si no hubiera tenido la obligación de fabricar unos gemelos, posiblemente nunca hubiese hecho esta pieza.
Los gemelos en sí me gustan, me parecen un ornamento precioso y antiguo, lleno de elegancia y fineza. Además, como los pendientes, hay que hacer un par, y eso me gusta mucho, fabricar otra pieza igual.


Primer y único boceto.

Por eso pensé que conmigo no iba mucho realizar una pieza de joyería masculina y el gemelo puede ser delicado y ornamental para una prenda liviana de mujer como es una blusa.
Con aquello de la efervescencia primaveral se me vinieron a la cabeza las flores, realizar los pétalos sobre una plancha de 0,5 mm y luego embutirlos hasta lograr la forma deseada.
Tras esto, agujerearlos en el centro con un taladro de 1 mm y así tener sólo que esmaltar esa pieza que irá después engarzada a la cadena.

Dado de embutir y pétalos

La técnica del esmalte es compleja, yo me limité a escoger y hacer unas pruebas con unos tonos turquesas hasta conseguir el más sugerente para mi gusto.


Preparando el esmalte
El horno ha de estar a una temperatura de entre 700 y 900 grados, previamente hay que disolver el esmalte y trabajarlo hasta dejarlo fino, son pequeñas partículas de cristal, finas como la arena, se elabora con agua y un mortero y luego se aplica con un pincel sobre la pieza a esmaltar.



Aplicando el esmalte

Una vez que ya tengo las piezas esmaltadas listas, queda preparar el resto que componen cada gemelo. Aros de hilo de media caña, tubos que hacen el tope de la trasera del gemelo, hilo redondo de 1 mm al que he soldado en el extremo una bola de plata pura para que haga tope en la flor.

Piezas esmaltadas y espiral de media caña para los aros


Piezas para engarzar

Una vez soldado un aro al tubo, comienzo a soldar el resto haciendo una cadena hasta la pieza de la flor, que ha sido engarzada con el hilo con bola que se ve por la parte esmaltada, y en la trasera, este mismo hilo compone el último eslabón de la cadena.

Aros para la cadena

En el proceso he tenido que prescindir del esmalte que estaba en el extremo de los tubos, ya que al soldar el primer aro de la cadena a esta pieza, a causa del calor aplicado el esmalte se ha dañado y he decidido lijarlo hasta hacerlo imperceptible.
Para dar una pequeña gracia de color, he engarzado unas turquesas en granalla naturales muy pequeñas al polémico aro soldado al tubo.







                                                  

El resultado del trabajo son estos gemelos, muy ligeros y flexibles. Ahora sólo necesito una preciosa blusa de dos ojales.


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